

Cómo evitar los anillos de Venus
Por Carmen Navarro
Los anillos de venus son las arrugas que surgen en el cuello, en forma de círculos, y que se originan, sobre todo, por la edad.
La aparición de los anillos de venus es cada vez más frecuente por el abuso que hacemos de las nuevas tecnologías que nos obligan a forzar la postura durante horas. Y no olvidemos que, además, a partir de los 25 años comenzamos a perder colágeno y elastina, algo que acentúa esas marcas. En este artículo te mostramos cómo combatirlos
¿Qué podemos hacer para combatir las arrugas del cuello?
1. Muchas veces nos olvidamos de tratar y cuidar la zona del cuello y del escote durante nuestra rutina de belleza diaria y eso incide de manera directa en la aparición de los anillos de Venus. Es aconsejable, después de realizar la fase de limpieza facial, realizar un masaje ascendente con un cosmético que nutra e hidrate la zona.
2. Salvo el factor de la edad, el resto podemos combatirlos siendo disciplinados. Empezaremos por los cuidados cosméticos. De día emplea un suero que reafirme y combata la flacidez, con movimientos ascendentes, y finaliza, siempre, con la protección solar. Por la noche te recomiendo una crema nutritiva, reafirmante, que ayude a recuperar la piel de cuello y escote de las agresiones sufridas durante el día. En muchas ocasiones puede ser la misma que emplees para el rostro y son acertadas si contienen ácido hialurónico, silicio, colágeno, vitamina C…
3. A partir de los 40, te aconsejo que emplees una crema específica para obtener los mejores resultados. Como por ejemplo, ARÛDE ARM&DECOLLETE BALM, producto específico de Montibello para cuello, escote y brazos. Si dispones de más tiempo, aplica una mascarilla tensora que te ayudará, además, a redensificar la zona. Recuerda que estamos tratando una piel más fina y delicada, con un tejido subcutáneo que disminuye con la edad.
4. Una vez a la semana, o cada quince días si se trata de una piel más delicada, realiza un peeling enzimático que te ayude a eliminar impurezas y dar vitalidad. Realiza un exfoliado suave y consigue deshacer las uniones entre las células muertas, pero sin dañar las que están en buen estado.
5. Y presta atención al maquillaje. Utiliza tu base habitual sobre el rostro, cuello y escote para uniformizar el tono de la piel y camuflar pequeñas imperfecciones; finaliza utilizando sobre el doble mentón y el cuello polvos de bronceadores (o un tono más oscuro que la base) con ayuda de una brocha gruesa.
6. Además de la protección solar, emplea cosméticos que te protejan de la luz azul que emiten los dispositivos y que dañan la piel. Estar sobreexpuestos a la luz azul eleva el riesgo de hiperpigmentación, pero aún hay más, daña la elasticidad de nuestra piel. La Luz azul tiene la capacidad de penetrar en nuestra piel, incluso aún más que los rayos UV, creando radicales libres y rompiendo de esta manera las estructuras celulares. La consecuencia más directa y visible es que disminuye la elasticidad de la piel y daña su estructura.
7. Cómo consejo final, evita las posturas forzadas, desconectando y marcándote un tiempo para el consumo de tecnología y un tiempo de tecnología free que nos permita evitar esas arrugas tan marcadas.